El presidente cargó contra el magistrado que lleva la causa y este le respondió pidiéndole que no "interfiera" en la investigación.
La causa por la muerte de más de un centenar de personas por fentanilo contaminado escaló al plano político con una dura acusación del presidente Javier Milei, quien señaló un presunto "encubrimiento atroz" sobre el dueño del laboratorio HLB Pharma, Ariel García Furfaro. Las declaraciones del mandatario, realizadas durante un acto de campaña en La Plata, intensificaron el enfrentamiento entre el Gobierno y la Justicia, luego de que la Vocería Presidencial ya hubiera emitido un comunicado en el mismo sentido.
"No pueden salirse con la suya de cualquier barbaridad, sin importar su gravedad. Tomemos como ejemplo el encubrimiento atroz de Ariel Furfaro, un eterno socio kirchnerista, por la causa del fentanilo", disparó Milei ante la militancia de La Libertad Avanza (LLA), que respondió con el cántico "asesino, asesino".
El presidente vinculó directamente el caso con el kirchnerismo y la provincia de Buenos Aires, al cuestionar la labor del juez Ernesto Kreplak, hermano del ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak. "¿Acaso es casualidad que el juez de la causa justo sea el hermano del ministro de Salud de Kicillof?", se preguntó Milei, antes de cerrar su alocución con la idea de que "es el amiguismo, la corrupción y el encubrimiento que ya destruyó al país y no quieren soltarlo en la provincia".
La acusación de Milei se produce horas después de que la Vocería Presidencial, a cargo de Manuel Adorni, emitiera un comunicado que ya había generado polémica. En el texto, se pedía la "detención inmediata" de García Furfaro, a quien se tildaba de "el Señor del Fentanilo", y se advertía con la recusación del juez Kreplak si no ordenaba el arresto.
El comunicado acusaba a García Furfaro de ser un "hombre vinculado a Lázaro Báez" que "pasó de verdulero a empresario farmacéutico multimillonario" y señalaba al ministro Nicolás Kreplak como uno de los "principales clientes" del laboratorio.
El juez federal Ernesto Kreplak, a cargo de la investigación, respondió con dureza a las presiones del Ejecutivo. En una réplica contundente, le recordó al Presidente "su obligación constitucional de abstenerse de interferir en una causa penal en curso". El magistrado defendió la investigación que lleva adelante y criticó la postura del Gobierno. "Suficientes omisiones y dificultades ha debido superar la investigación hasta ahora como para que, sobre ello, se pretenda politizar un trabajo judicial bien hecho", sostuvo.
