El Martín Fierro de Oro al streaming científico del CONICET sorprendió incluso a sus propios protagonistas. Para Ezequiel Mabragaña, investigador del organismo y uno de los científicos que participó de la expedición que permitió mostrar en vivo el fondo del Mar Argentino, el reconocimiento fue “un mimo”, pero también llegó en medio de un contexto difícil para la ciencia nacional.
“Si me decían antes de subir al barco que íbamos a ganar un Martín Fierro de Oro, pensaba que me estaban tomando el pelo”
“Si me decían antes de subir al barco que íbamos a ganar un Martín Fierro de Oro, pensaba que me estaban tomando el pelo”. La transmisión, realizada durante una campaña oceanográfica junto al Schmidt Ocean Institute, alcanzó picos de hasta 90 mil espectadores en simultáneo y superó los 17 millones de visualizaciones, cifras impensadas incluso para los propios organizadores.
Mabragaña explicó que el objetivo nunca fue el impacto mediático. “Nosotros subimos a investigar. Éramos casi 25 investigadores de todo el país con la idea de conocer el fondo marino argentino y transmitir lo que veíamos, porque esa es la política de la fundación: todas las expediciones se transmiten en vivo”, señaló. Sin embargo, reconoció que no estaban preparados para el nivel de repercusión que tuvo el streaming. “En otros países tenían 800 espectadores como mucho. Nosotros decíamos, medio en broma, ‘a ver si llegamos a mil’”.
“En otros países tenían 800 espectadores como mucho. Nosotros decíamos, medio en broma, ‘a ver si llegamos a mil’”
La viralización fue inesperada. “Nos enterábamos por mensajes de familiares y colegas que desde tierra nos decían que era una locura. Nosotros estábamos abajo del mar, sin dimensión de lo que estaba pasando”, contó. Parte del atractivo, según el investigador, estuvo en la espontaneidad: “No había guión, no éramos streamers. A veces hablábamos horas y otras veces no decía nadie nada. Contábamos lo que veíamos, con pasión, como docentes y científicos”.
Especialista en peces cartilaginosos, Mabragaña relató que incluso para los propios investigadores fue una experiencia inédita. “Era la primera vez que veíamos nuestro fondo marino en vivo, con los animales en movimiento, con sus colores reales. Yo estudio peces hace más de 20 años y aun así me sorprendí. Me sentía como un chico mirando eso por primera vez”, confesó.
“Era la primera vez que veíamos nuestro fondo marino en vivo"
Cada científico vivió el descubrimiento desde su área. “El especialista en corales se volvía loco con los corales, el de anémonas con las anémonas, el de estrellas con las estrellas. Esa emoción se transmitía y la gente la sentía”, explicó. Para él, otro factor clave fue que el público iba descubriendo al mismo tiempo que los investigadores. “No era un documental armado. La gente investigaba con nosotros”.
El reconocimiento del Martín Fierro fue celebrado, pero también dejó sensaciones encontradas. “Fue un mimo, un agradecimiento enorme de la sociedad, pero llegó una semana después de un golpe muy fuerte”, advirtió. En ese sentido, alertó sobre el desfinanciamiento de la ciencia y la tecnología. “De un plumazo se eliminaron proyectos ya aprobados. Investigaciones en todo el país quedaron sin financiamiento. Nos cortaron las piernas”, afirmó.
"Investigaciones en todo el país quedaron sin financiamiento, nos cortaron las piernas"
El investigador remarcó que el éxito del streaming fue posible gracias a años de inversión estatal. “Yo soy investigador del CONICET porque tuve la posibilidad de formarme, de acceder a subsidios. Nada de esto es mérito individual, es producto de políticas públicas sostenidas en el tiempo”, subrayó. Y agregó que muchos becarios que participaron de la campaña hoy no saben cómo seguirá su futuro académico.

