“Ana Vaca-Mi Casa” de Coronel Moldes era un hogar de ancianos que funcionaba hace 30 años, y si bien estaba albergando a un adulto mayor, decidieron cerrar sus puertas por no ser sostenible.
El hogar que contaba con una planta de 16 empleados municipales (cuidadores y administrativos), demandaba mensualmente un monto de 15 millones de pesos, destinando los recursos a sueldos, servicios, alimentación y mantenimiento general.
Es un gasto excesivo para un solo abuelo, por más que se trate de una cuestión sensible. En un contexto donde hay que priorizar los recursos y hacer un uso responsable del dinero público, mantener una estructura de este tamaño con tan poca demanda no tiene sentido” comentó el intendente de Coronel Moldes, Omar Carrasco a El Tribuno.
Explicó también que el abuelo que se encontraba en el hogar fue reubicado en la residencia para personas mayores “Las Moras” en Chicoana.
Esta acción del municipio fue considerada necesaria por no ser sostenible el hogar, tomando también la decisión de readecuar al personal en otras funciones municipales.
Esta institución, que contará con el inicio de sumarios administrativos por la pérdida de bienes del hogar, llegó a albergar a 25 adultos mayores en su momento.
Desde la gestión actual del municipio se encuentran regularizando la situación legal del inmueble, por lo que pasaría el hogar a tener escritura a nombre de la municipalidad.
Si bien todavía no se conoce la nueva función que tendrá el hogar, se plantea la hipótesis que sea un centro de día para adultos mayores, un espacio recreativo y de contención, pero aclaró Carrasco que la decision se tomará de manera transparente y con participación de Concejo Deliberante: “invito a los vecinos a participar y opinar sobre el futuro del edificio” finalizó.
